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La ONG "MUJERES POR IGUALDAD DE DERECHOS ESCOBAR" ya no existe, pero el contenido aquí publicado es demasiado importante como para cerrar el blog. Para mayor información sobre esta ONG, comunicarse a
giordano.silviabeatriz@gmail.com

¿El Enemigo en Casa? - 2

¿El Enemigo en Casa? es un trabajo realizado por la Psicóloga Clínica y Comunitaria Licenciada Alejandra Palacios Banchero*. La extensión de este escrito hace que debamos publicarlo en varias entregas, pero la claridad y simpleza de su exposición permite una comprensión clara y una ayuda para todas las perdonas que se encuentran en situación de VIOLENCIA FAMILIAR

Pero si tener control absoluto sobre la relación, pues cree que así obtendrá respeto e importancia.
Piensa que puede ser el dueño absoluto de tu persona.

No habla, no escucha, no responde, no dialoga, no respeta, no le importa lo que yo sienta, lo que yo piense, lo que yo diga,

“Estas loca”, “déjame en paz”, “no tengo tiempo para escuchar tonterías”... “tu me provocaste”... “no se de qué te quejas”, “tu tienes la culpa“.. son algunas frases que desmerecen, maltratan y nos
sugestionan para culparnos de su conducta.
Sus complejos no lo dejan ver la realidad.


Su comportamiento genera miedo, odio, resentimiento y dolor. Un dolor tan grande que nos enferma y no nos deja ver salida a nuestra situación.

Estas sola y aislada...


Te sientes tímida, sientes vergüenza, te sientes culpable y crees que nadie te entiende y nadie puede hacer algo por ti.
El te ha sugestionado, te ha manipulado con amenazas, humillaciones, insultos, para que tu creas que lo provocas, que no lo entiendes, que eres culpable de su comportamiento y que no
hay nada ni nadie que pueda sacarte de esta situación.

En ese estado, desconfías de los demás. Lo defiendes y no permites que otros intervengan.
Sientes que tu y el están en el “mismo barco”, pues piensas que podría ser peor y que es la vida, son los problemas, la situación, otras personas, lo que hace que el actúe así.

Tu vida termina...

Girando alrededor de su persona, de su voluntad, de sus deseos y decisiones.
Ya no eres dueña de tu persona. Estas sola, amargada, resentida, triste … Sientes que nadie entiende, nadie comprende.
El rencor y la culpa ha endurecido tu corazón.Nada te emociona, nada te conmueve.
Te descuidas. No te importa tu imagen, tu apariencia. Todo lo haces sin ánimo, sin interés.
Todo es rutina que haces automáticamente sin ganas ni emoción.
Te olvidas de ti, de que tu existes, de que tu eres una persona autónoma, con voluntad, opinión y decisiones propias.
No sientes nada, nada te importa, no quieres nada para ti..


Tus sentimientos, tus emociones, tus reacciones...


...son poco comprendidos por el silencio que guardas y no compartes.
Al igual que otras víctimas en situación de riesgo, estas paralizada ... con miedo … Te identificas con el agresor y no puedes actuar. Desconfías
de la gente, de las personas que probablemente podrían ayudarte a salir de esta situación.
Hay en ti amargura, desilución, sensaciones de vacío, ausencia de sentimientos, desconfíanza, culpa, hostilidad.
Haz perdido la confianza en ti misma y en el mundo y te obsesionas buscando explicación a su comportamiento, a las agresiones recibidas y que alguien te asegure que esta no volverán a ocurrir.


En secreto y solo para ti, quieres, necesitas que tu vida cambie y rescatar la libertad, la tranquilidad, la felicidad que un día perdiste.

Te entendemos y reconocemos lo que sientes...


Esta atónita, paralizada. No eres capaz de responder...
Te crees culpable sin saber por qué. Tus sentimientos te confunden, te desorientan y no sabes qué hacer.
Son reacciones esperadas en personas que pasan por tu misma situación. Por eso te entendemos y sabemos lo que sientes.
No es la vida, no es la situación, no es así la convivencia, no es así el amor.
No eres tú la que lo provocas o la que haces o dejas de hacer. Es el quien no se controla, no se relaja, no escucha, no razona, no piensa. Explota sin motivo ni razón.

Palabras, disculpas y promesas se las lleva el viento... Acciones borran pasiones.

Sus complejos, sus temores, su baja autoestima, su descontrol, su baja tolerancia a las frustraciones, su falta de habilidad para relacionarse en forma más positiva y armónica y el no saber cómo resolver los conflictos, es lo que hace que quiera controlar la relación y reaccione manipulando, maltratando.
Su actitud, al igual que el dependiente alcohólico y el drogadicto, es la de negar, minimizar, racionalizar o presentar amnesia selectiva para explicar y justificar su comportamiento. De esta forma se exime de culpas y la traslada a tu persona —su víctima— a las circunstancias o a otras personas.
Su conducta trae consecuencias muy graves para tí. No esperes que el algún día la cambie su si no “toca fondo”; reconoce sus errores y aprende a relacionarse en forma más pacífica y armónica.
El comportamiento violento es una conducta aprendida y como cualquier comportamiento aprendido, puede ser cambiado. Pero no es fácil.
Es necesario que empiece a conocerse a sí mismo, a reconocer que tiene un problema y que empiece a buscar la solución.
Las palabras, las disculpas y las promesas se las lleva el viento... Acciones borran pasiones.

Ante el estrés difícil de soportar, reaccionas con...


Incredulidad, rabia, tristeza, insensibilidad, resentimiento, miedo, angustia, culpa, soledad, apatía, intranquilidad.
Sientes cansancio, insomnio, dolor de cabeza, pesadillas, te duele el estómago, tienes la sensación de un nudo en la garganta. Te sientes
enferma.
No tienes interés por la vida, por las cosas.
No paras de hacer cosas. Te obsesionas por el orden, por la limpieza. Tienes que estar haciendo siempre algo que te distraiga, que te agote, que no te deje pensar, recordar … Pero nada te da resultados. Las imágenes vienen y se van sin que tu lo quieras, sin que te des cuenta.
Estás distraída, nerviosa, descuidas tu persona. En muchas ocasiones haz pensado que mejor sería no vivir.

El Síndrome de la Mujer Maltratada es un conjunto de síntomas y reacciones que se presenta en toda víctima de violencia familiar, A pesar de la denominación, se aplica también a hombres, niños y ancianos..
Tienes la imagen gravada y la sensación de oír a tu pareja insultándote, golpeándote, desmereciéndote. Son imágenes que vienen de pronto a tu mente, sin control, sin que medie tu voluntad y te hacen revivir esos instantes, con el mismo miedo y la misma angustia del momento.
Sientes que no eres nadie, que no puedes hacer nada, no sabes cómo controlar la situación.
Pasan los días, pasan los meses, pasan lo años, todo empeora y no sabes qué hacer con tu vida.
Sufres consecuencias graves en tu salud física y mental.
Todo este conjunto de síntomas y reacciones se denomina Síndrome de la mujer Maltratada y se presenta en toda víctima de violencia familiar, sea mujer, hombre, niño, anciano. Son reacciones normales ante una situación anormal (Síndrome de la Mujer Maltratada).

Vives obsesionada, temerosa, alterada, no ves lo que pasa a tu alrededor...

Tu humor cambia constantemente. Unas veces pareces calmada, sobreproteges a tus hijos, te muestras atenta, cariñosa. En otros momentos,
no sientes nada, no tienes paciencia, todo te molesta, todo te fastidia, estas de mal humor. A tus hijos, a las personas que se acercan a tí, los rechazas, los descuidas, los maltratas, los agredes y te sientes culpable. Estas desplazando el maltrato recibido pues no eres capaz de responder al agresor.
En ocasiones, a la menor contrariedad o por cosas sin importancia, respondes con hostilidad o violencia, a tus hijos, a un familiar, a tus amigos, tus vecinos, al dependiente de una tienda, a cualquier persona que pasa por la calle o a cualquier autoridad o persona que quiera decirte algo, que te aconseja, que quiera intervenir. Tu malhumor lo descargas también en las cosas.
Es que no puedes defenderte ni responder a la violencia que recibes de tu pareja y la descargas en las cosas o en otras personas sin darte cuenta.
Tu autoestima está disminuida, no logras controlar las situaciones y te sientes sola y sin saber qué hacer.


Pero, sin darte cuenta, sin quererlo y al igual que el, tu también estas maltratando a tus hijos, que están sintiendo lo mismo que tú!!!

La conducta de la víctima es también una conducta aprendida.


Mujeres por Igualdad de Derechos Escobar

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